La vida es cíclica y como círculo perfecto llega abril y con él el mes más ajetreado para la sociedad calagurritana. Los días se van alargando y con ellos el trabajo de las asociaciones que han llevado a la Semana Santa hasta cotas máximas de popularidad. ¡Qué orgullo es ver cómo en medios nacionales e internacionales surgen como de la nada imágenes de trabadores de ojos claros o rudos y musculosos soldados romanos!
Retrocedamos… ¿surgen como de la nada? No. Cada pequeña actividad, cada minuto de cualquiera de estas preciosas imágenes lleva consigo decenas de horas de trabajo. Por eso duele tanto. Por eso se clava como una espina ver un video de La Rioja Turismo centrado en la Semana Santa riojana sin una sola imagen de Calahorra.
Veo el vídeo, una vez, dos veces… y así hasta diez. Compruebo frame por frame que mi intuición inicial se ha convertido en una dura realidad. Que ni Mercaforum, ni las procesiones que llenan nuestros días de recogimiento, ni la escenificación de Paso Viviente tienen un solo segundo. Y duele. Duele por Reyes, por Juan Carlos, por Javier, por Isabel y toda su tropa de fieles colaboradores. Duele por Kata, por Santi, por Valeriano… Duele por las más de 1.500 personas que codo a codo, hombro a hombro, hacen de la Semana Santa calagurritana lo que es.
Duele por mucho que sea habitual. No me resisto a conformarme ni a acostumbrarme porque las injusticias hay que combatirlas y como medio de comunicación hay que hacerlas visibles y denunciarlas.
Duele el olvido y no valen las excusas. Duele que desde el ayuntamiento se haya tenido que llamar a la Consejería para advertirles del fallo garrafal. Duele que las quejas se queden únicamente en los muros de facebook… y es un dolor compartido por muchos. Duele que ahora nos cuenten que estaba previsto hacer uno dedicado a la Semana Santa Calagurritana en exclusiva cuando nadie tenía conocimiento de ello a priori.
Pero también duelen otras cosas como que el trabajo turístico que se hace a lo largo del año desde la ciudad deja mucho que desear. Quitas Semana Santa y Jornadas de la Verdura y hay poco o nada. Cifras abultadas que cuentan a calagurritanos como turistas. Quejas de grupos porque se encuentran cerrada la oficina de turismo o porque nadie les ha sabido recomendar fuera de las jornadas un restaurante que ofrezca un menú con verduras, o por los horarios excéntricos de los museos de la ciudad, o por la suciedad. Y sólo se me viene a la mente una frase: Perdónalos porque no saben lo que hacen.



